Pedro Laterra es miembro del Comité Asesor Científico (SAC) del Instituto Interamericano para la Investigación del Cambio Global (IAI) desde el año pasado. En una entrevista para el boletín del IAI, comparte detalles sobre su trabajo y los retos que enfrenta en la región andina patagónica de Argentina.
Laterra, quien trabaja como investigador del CONICET y la Fundación Bariloche, ha participado activamente en proyectos del Instituto como el comité de ciencia abierta y la mentoría a becarios (fellows) del programa STeP del IAI. A través de su experiencia en el mapeo y la evaluación de servicios ecosistémicos, ha corroborado la importancia de la transdisciplinariedad para conectar la ciencia con las políticas públicas.
"Estoy aprendiendo mucho de los fellows STeP del IAI y veo un gran potencial en la ciencia abierta para facilitar la toma de decisiones"
Uno de los proyectos clave en los que Laterra está involucrado se enfoca en el estudio de las invasiones biológicas, específicamente las de coníferas exóticas en la Patagonia, que se ven agravadas por el cambio climático. Estas especies invasoras, adaptadas a condiciones secas, están promoviendo incendios forestales más frecuentes e intensos, lo que representa una amenaza para la biodiversidad y la seguridad de las comunidades locales.
Laterra destaca la importancia de la participación ciudadana en la lucha contra este problema y a la ciencia ciudadana como una herramienta crucial. "A través de plataformas simples como WhatsApp, hemos logrado que la comunidad registre focos de invasión. Esto nos ayuda a crear mapas colaborativos y priorizar intervenciones en el terreno", explica. Además, subraya el valor de la colaboración entre la ciudadanía y las instituciones gubernamentales, que por sí solas no cuentan con los recursos suficientes para enfrentar el problema.
“El uso de serious games ayuda a cerrar la brecha ciencia-toma de decisiones, sin soslayar la importancia de las investigaciones sistémicas”
Laterra también trabaja en Paraguay, a través del consorcio Spaces, tratando de apoyar a ese país para la elaboración de políticas alineadas con los compromisos internacionales de reducción de emisiones. Otra de las líneas innovadoras en su trabajo es el uso de serious games como herramientas para cerrar la brecha entre la ciencia y la toma de decisiones. “Estamos desarrollando juegos serios como una forma de atravesar la interfaz entre la ciencia y las políticas, reconociendo que muchas veces la falta de contextualización de la investigación dificulta su adopción por parte de los tomadores de decisiones”, dice.
Finalmente, Laterra destaca la necesidad de que la ciencia esté alineada con las demandas sociales y políticas para lograr un impacto real. “La rueda siempre gira en la misma dirección: más investigación, pero sin una mirada sistémica, esos logros no se usan en el contexto problemático y de ahí la falta de adopción en políticas públicas”, concluyó. Para él, es indispensable combinar la ciencia, política y comunidad, a la vez que transformar las conexiones entre la sociedad y la naturaleza de manera que se equilibre la protección del ambiente con el bienestar social.
El enfoque participativo y transdisciplinario que promueve Laterra refleja la misión del IAI de integrar la ciencia y las comunidades, con énfasis en las poblaciones más vulnerables, para abordar los desafíos ambientales y avanzar hacia un mundo más sostenible.